{image}http://www.eldia.com.co/images/stories/120309/fli1.jpg{/image}Cuatro militares pertenecientes a la brigada Móvil 12 del Ejército, fueron condenados a 30 años por asesinar a un campesino, actualmente se hallan privados de su libertad en la guarnición militar de Apiay.
Un Juez de Granada Meta, dictó sentencia de 30 años a los militares involucrados en el caso, por el crimen de un civil, todo apuntaba a que éste era un caso más de Ejecución Extrajudicial, denominado “falso positivo”.
El 2 de septiembre de 2006, en el municipio de Mesetas en el departamento del Meta, tres soldados que estaban al mando del subteniente Luís Miguel Monsalve, asesinaron a sangre fría a un campesino de la región, posteriormente los soldados lo presentaron como un miliciano que intentaba realizar un ataque al ejercito con una granada de fragmentación; sostenían los uniformados que al ser descubierto emprendió la huida intentando activar el artefacto explosivo y que por esta razón fue dado de baja.
Tras las investigaciones se comprobó que el hombre asesinado a manos del Ejército era un humilde campesino de la región que no pertenecía a ningún grupo al margen de la ley, ni que atentó contra el ejército ni mucho menos portaba una granada. Los análisis forenses demuestran que el hombre recibió dos disparos de frente hallándose en estado de indefensión cuando fue asesinado.
Este es uno de los miles de casos que existen de crímenes perpetrados por las Fuerzas Militares de Colombia, en la actualidad los familiares de las personas ejecutadas, esperan a que se haga justicia frente a esta violación de Derechos Humanos y sea impuesto todo el peso de la ley a los responsables; pero como va la cosa, estos homicidios apuntan a la impunidad, pues al Estado no le interesa ahondar en éste asunto, por el contrario, desvía la atención en otros temas.